El Cerro de Los Almadenes de Otero de Herreros logra la declaración BIC

El Cerro de Los Almadenes de Otero de Herreros logra la declaración BIC

El yacimiento del Cerro de Los Almadenes de Otero de Herreros logra la declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de ‘Zona Arqueológica’. Ya es una realidad lo que el Ayuntamiento había solicitado hace unos años para uno de los más importantes yacimientos arqueológicos minero-metalúrgicos de España, por la perduración de la explotación y por la magnitud de los restos conservados.

La gran noticia será anunciada a todos los vecinos en un acto oficial que tendrá lugar el próximo jueves en el salón cultural de la localidad a las once de la mañana. El alcalde de Otero de Herreros, Meinardo Sanz, mostraba ayer su satisfacción por haber conseguido la declaración BIC para el Cerro de Los Almadenes, que impulsa la puesta en valor del yacimiento junto con la compra de los terrenos que el municipio adquirió este año.

Bien de Interés Cultural es la mayor distinción administrativa que se le puede otorgar a un bien. No es solo el “honor” de recibir esta categoría dentro del patrimonio cultural, sino que también ofrece un trato especial y se establecen automáticamente una serie de medidas encaminadas a proteger dicho bien y conservarlo. El alcalde agradece la “constancia” y el “esfuerzo” de todo el pueblo por un proyecto que comenzó hace unos doce años con las campañas de excavaciones y que empieza a obtener buenos resultados.

Para favorecer e impulsar la declaración BIC y la puesta en valor de este yacimiento de 6,4 hectáreas de superficie, el Ayuntamiento de Otero de Herreros compró este año los terrenos donde se ubican las prospecciones principales, dando un paso más para poder desarrollar los trabajos y afianzando más el proyecto. Las parcelas que ocupan el yacimiento han sido valladas para delimitar el terreno.

El asentamiento de Los Almadenes de Otero de Herreros se inició realmente ya en la Edad Media y pervivió hasta la época de los visigodos e incluso algo más tarde. Esto viene a plantear la pervivencia de la explotación durante unos dos mil años, independientemente de que posiblemente haya momentos de abandono y momentos de máximo laboreo que sucederían efectivamente en los siglos I a.C. y I d.C. y los siglos V y VI d.C.

Entre los hallazgos de esta década de excavaciones, destaca la existencia de dos baterías de honor, datadas entre los siglos V y VI d.C. que representan un hallazgo excepcional en la península ibérica, del que no se conocen paralelos y que hablan de la intensa explotación que sufrieron las minas en tiempos de los visigodos.

También se ha descubierto en estos años, habiéndose excavado solo un cinco por ciento del yacimiento de Otero de Herreros, un lavadero de mineral de cobre a media ladera, cerca de las baterías de los hornos, del que tampoco hay similar en la península ibérica, pues es el primero conocido.

Otra de las características de este yacimiento es la gran cantidad de pequeñas canalizaciones y vías de agua que se encuentran distribuidas por todo el Cerro, que según los arqueólogos, no pueden ser solo para evitar la entrada de agua en los hornos, sino que su función también consistiría en suministrar agua al lavadero del mineral antes de su fundición, así como para el posterior enfriado y tratamiento del metal una vez finalizado el proceso de reducción.

ZONA ALTA
Por otra parte, en la zona más alta del Cerro se han encontrado indicios de la existencia de lo que no es sino un imponente almacén, con diversas estancias, dispuestas en torno a un patio central y con numerosos parecidos en otros yacimientos romanos. Asimismo, se han descubierto una serie de estucados en la pared de gran calidad y cerámicas procedentes de la Galia. Y junto a esa estancia se ha destapado un muro que podría corresponder con una muralla.

Hace dos años fue hallada una escultura romana de una matrona sedente común, depositada en el Museo de Segovia, a la que el año pasado se unió una cabeza esculpida en piedra caliza. También se ha descubierto una escalinata que subía al Cerro. “Estamos conociendo mejor cómo eran esos lienzos de muro exteriores a la plataforma superior del yacimiento, de más de dos metros de altura. Arriba tenemos no solo la zona vinaria, sino que hay otros elementos constructivos que nos hacen pensar que había mucha más actividad, no solamente minero-metalúrgica, sino que había otras actividades”, explicaba el pasado verano uno de los codirectores del yacimiento, Mariano Ayarzagüena.

El año pasado se hallaba una cabeza de piedra caliza en el área de construcciones altoimperiales de la parte más elevada del Cerro que podría formar parte de la escultura encontrada en 2019 en las mismas excavaciones. La cabeza presenta características artísticas y morfológicas similares a la de la estatua, pero aún no se puede afirmar ni negar que haya alguna vinculación entre ambas piezas.

Las excavaciones en este yacimiento se llevan realizando desde el año 2009 por el equipo de la Sociedad Española de Historia de la Arqueología de forma ininterrumpida. Los trabajos de investigación cuentan con el apoyo de la Junta de Castilla y León, el Ayuntamiento de Otero de Herreros, y empresas y asociaciones, como la Asociación de Vecinos de Otero de Herreros.
Con la declaración BIC conseguida, comienza el trabajo de promoción y divulgación del Cerro de Los Almadenes. De hecho, este verano grupos de arquitectos han estado trabajando sobre el terreno para realizar sus proyectos de puesta en valor de cara a años venideros, para que segovianos y visitantes puedan disfrutar de este patrimonio.

 

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Fuente: El Adelantado